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sábado, 10 de septiembre de 2011

GANESHA forma elefante humano y divino niño de la faz resplandeciente (Parte 1)

GANESHA forma elefante humano y divino niño de la faz resplandeciente

Así es divinos seres benditos del Infinito; pues allí no terminó todo; porque cuando el Supremo Unigénito Dios encarnó y nació como un maravilloso Niño lleno de Faz Resplandeciente; todos los infinitos Seres estaban presentes allí; a los rededores de la Tierra junto al glorioso Niño Trascendental, estaban llenos de una multitud de Seres vivientes; también los Cielos estaban llenos de las potencias de Seres vivientes del infinito Universo; 
quienes todos en gran tumulto de voces, entonaban honras al Hijo Primogénito de Dios; loando, Gloria, Gloria, Gloria al Hijo Unigénito de Dios que ha encarnado como todo Benefactor lleno de Amor, Verdad y Justicia divina; mas; la divina Madre Parvathi, al ver a tanta multitud de Seres vivientes, se angustió grandemente como nunca; y sintió temor y miedo; porque como el divino Shiva se hallaba en meditación en su propio Ser Trascendental; 
alejado del lugar y las multitudes; la Madre Parvathi, por cierto, no quiso perturbarle su plena contemplación de sí mismo; entonces vuestra divina Madre Parvathi, y Madre Suprema de todas las criaturas vivientes del Infinito; en su noble angustia de madre, inmediatamente decidió ir a la Primera Dimensión Espiritual; al gran Reino de los Cielos Celestiales del Bendito Creador Universal Brahma; a la divina Morada Eterna de vuestro Creador; así pues, en un 
abrir y cerrar de ojos la divina Madre Parvathi llegó instantáneamente al Reino de 




los Cielos Celestiales; donde Yo, vuestro único Dios moro en la forma del Eterno Creador Brahma; así pues al llegar vuestra Madre Divina, a la Eterna Morada Celestial; halló al Bendito Brahma, que significa Creador Universal Eterno; recitando los Vedas y honrando al maravilloso Primogénito de Dios; entonces Parvathi, grandiosa Madre Divina; se sentó en la 
Naturaleza Fragante del Reino Celestial, junto al lado del Glorioso Brahma el Creador; luego al dirigirse a Él le dijo: ¡Oh, divino Ser, Brahma; me siento angustiada porque todos los Seres de Tu divina Creación, se han congregado rodeándolo a Mi Amado Hijo Divino; no obstante algunos no son dignos ni meritorios de ver el Bendito Rostro Resplandeciente de Mi divino Hijo; pues muchos de ellos tienen manos impuras y son indignos; y todos lo
 desean para sí; todos los Seres de la Tres Regiones Cósmicas del infinito Universo, desean poseerlo; y temo que me lo puedan arrebatar; porque hasta los mismos Seres invisibles lo desean para sí; así temo que entre ellos se desate una gran lucha a fin de tenerlo para sí; pues dime, Sabio en la Creación; dime, ¡Oh Brahma!, Bendito Creador; dadas las circunstancias, ¿Qué puedo hacer para alejarlos?; porque nadie quiere apartarse de sus auspiciosas
 influencias; dime entonces, Creador de las Lumbreras ¿Qué puedo hacer?; así inmediatamente el divino Creador Eterno, le respondió diciendo: Yo también estoy 
preocupado, porque todos Mis hijos del infinito Universo Viviente, se han volcado masivamente para presenciar el glorioso Acontecimiento del Hijo de Dios; pues veo que casi sus labores múltiples se han paralizado; veo que han suspendido sus trabajos que me dedican como adoración en todo el Cosmos infinito; y viendo Yo el futuro, casi puedo presenciar, que el desastre, caos, y retraso puede desatarse en todo el Universo Viviente; lo cual no sería lo correcto ni lo aconsejable; y por eso, Yo te doy este consejo: ¡Oh, Bendita Parvarthi!, a tu divino Hijo de la Faz Radiante, que le honro como Mi Amado Primogénito Ekaulama; debes cubrir su Bendito Rostro Radiante, con una divina Máscara Aparente digna a su Bendito Ser; no obstante este disfraz debe ser el más Glorioso y Atrayente digno de reverencia; así disfrazado; tan solamente será visto su Verdadero Ser y su Grandiosa Forma Original, por los sabios e inteligentes en Conciencia de Dios; así los sabios videntes, y quienes se acerquen al gran Camino Espiritual verdadero, puedan ver y poseer su infinita Grandeza Trascendental; mas, los ilusos y los indignos; los desenfrenados en el deseo carnal; los quienes viven en el mundo de los placeres momentáneos; los quienes viven una vida pasajera ilusoria; los quienes se complacen así mismo con deseo y satisfacción efímera irreal; y los 




poco sabios que solamente se fijan en las apariencias y formas externas; los que no buscan trascendencia no podrán ver ni poseer su infinita Grandeza; que es la misma Grandeza de la Realización de la Vida, Realización del Espíritu, y Realización de Dios; porque ellos lejos de estar en Conciencia de Dios, tan solamente tienen ojos para ver las apariencias y las formas externas; y así caen de su plataforma ganada; porque no pueden ver la esencia de todo ser y el interior de lo aparente; así mismo; también tan solamente tienen oídos para oír ruidos toscos, extraños, y palabras groseras; igualmente; solamente tienen boca para hablar de cosas sin valor alguno para la vida, y para la Vida Espiritual; y así fue; estas fueron las Palabras Legítimas de vuestro Creador Universal; quien siendo Glorioso, el de la Mente Cósmica y Conciencia Cósmica; expresó la Verdad inquebrantable para la Gloria de todos sus hijos del Universo Material infinito; pues al oír estas Sabias Palabras Sagradas, de la Bendita Mente Cósmica del grandioso Creador Eterno, Padre Celestial; la gloriosa divina Madre Parvathi, le preguntó diciendo: ¡Oh, divino Brahma, Eterno Celestial, y Sabio en la Creación; pues divinamente te pregunto: ¡Oh, Constructor de los Mundos, Arquitecto Universal, y Eterno Padre de todas las Criaturas vivientes del Universo!; dime pues: ¿Cuál es la divina Criatura animal, digna y mayor que has creado sobre la faz de la Tierra?; 
dime por favor, respóndeme; entonces vuestro Grandioso Eterno Padre Celestial, respondió diciendo: Es el Bendito Elefante; y luego la Madre Benévola, Parvathi, volvió a preguntar por segunda vez: Dime Padre Eterno de las Criaturas vivientes, ¿el más noble y bueno?; entonces el divino Creador Brahma respondió diciendo: Es el divino Elefante; pues por si las dudas, la Madre Parvathi vuestra, volvió a preguntar por tercera vez: Dime Noble Protector de las Criaturas, Tú que conoces la pureza de toda Criatura viviente, y ¿el más fuerte, manso, y auspicioso muy digno como ningún otro?; luego el divino Brahma replicó inmediatamente: Es el Bendito Elefante; entonces la Madre Parvathi, Madre del grandioso Unigénito de Dios, suspiró de alegría; y dijo: Así será; por Tus Auspiciosos Consejos, el divino Rostro Original de su Radiante Forma de Mi Amado Hijo Bendito; lo ocultaré, cubriéndolo con una divina Máscara Aparente de un divino Elefante, para que nadie me lo arrebate; ni se sirva de Él; pues solamente los sabios con real inteligencia y mente sabia y honesta, conocerán Mis divinos Secretos para la trascendencia final; pues solamente aquellos dignos ante Mí, conocerán la gran Verdad para la Suprema Realización de Dios; y para ello; el Hijo Unigénito de Dios es el único Camino para la Iluminación de los Espíritus y el retorno hacia Dios;
después de estas Santas Palabras, la Madre Parvathi despidiéndose del Bendito Brahma, 






retornó inmediatamente a la Tierra; y así fue; así es divinos seres benditos; porque de Verdad os digo que este hecho es muy conocido en vuestro planeta, si alguno de vosotros aún no conocéis, es porque jamás habéis buscado realmente; no obstante, habéis presenciado la Transfiguración de Mi Amado Hijo Primogénito; manifestado en Oriente y en Occidente; pues tal es su verdadera Forma y Rostro Resplandeciente Maravilloso; y su divina Existencia trasciende al principio de la Existencia de los mundos materiales; así es divinos seres amados; pues ¿Quién realmente conoce al Hijo Primogénito de Dios, sino es Dios mismo?; es así que vuestro Absoluto Dios, os digo, en la más Pura de la Verdad que así realmente es y fue así; pues realmente Mi Amado Unigénito, se encarnó en su gloriosa Forma Original Trascendental en vuestro mundo; que más adelante encarnó como Jesucristo en el Medio Oriente; y tuvo otras encarnaciones parciales y muchas manifestaciones presenciales; porque realmente es viviente y no muerto; y ahora oíd lo más crucial de lo que ocurrió; pues incomparablemente cuando la Madre Divina, grandiosa Parvathi retornó de vuelta a la Tierra; en el planeta Tierra apenas había pasado un cuarto de media hora; y al estar cerca del Niño Divino; halló al Bendito Vishnú, Regente de la Segunda Dimensión Espiritual; pues en Verdad, Yo mismo vuestro único Dios Absoluto, estoy en la forma de Vishnú; en un Aspecto 






Glorioso, Regente del Segundo Reino de los Cielos Trascendentales; pues inquebrantablemente así es divinos seres benditos del planeta Tierra; porque de Verdad os digo que realmente así y siempre lo ha sido; y es así que; el Glorioso Vishnú de los Dieciséis Rayos, se halló junto al Hijo de Dios; recitando el Vedanga, cuerpo de los Vedas y honrando al Niño Unigénito de Dios; y el Maravilloso Niño de la Bendita Faz Radiante; en su pequeña mano sostenía una hermosísima caracola concha marina; que el Bendito Vishnú le había obsequiado, el mejor de lo que Él mismo poseía; y este obsequio auspicioso, le otorgó diciendo: Al Bendito Primogénito de Dios, como a Mi mismo Primogénito, le ofrendo todo lo que poseo como más auspicioso; porque todo es de Él invariablemente; así ofrezco mis honras a lo que es más Glorioso entre los Gloriosos y Auspiciosos, pues nadie puede hacer más por el todo Benefactor de las Criaturas; quien es todo Amor, Verdad, y Justicia de Dios; así es divinos seres benditos; legalmente estas fueron las gloriosas Palabras del Grandioso y Maravilloso Vishnú; quien acompañado por la más bellísima grandiosa divina Madre Lakshmi, descendieron desde la Segunda Dimensión Espiritual; Reino de los Cielos Trascendentales; y así fue el gran Acontecimiento de los Hechos Gloriosos; pues vuestro Supremo Dios Absoluto, Shiva ShamHari, ShamHari Jehová; os lo 








comunico infaliblemente tal como es y tal como fue el grandioso Acontecimiento Maravilloso; que muchos desearían ver de nuevo; y los muchos que lo presenciaron; siempre lo recuerdan como el único hecho más crucial y verdaderamente incomparable jamás con ningún otro acontecimiento; pero no obstante en aquel entonces, la Bellísima Madre Suprema de auspiciosa Gracia Divina; tomó con su mano, a un hermoso y tierno pequeño Elefantito; quien a la par del nacimiento de Mi Amado Primogénito, había nacido; y su Madre Elefanta; era la Reina de todos los Elefantes de la Tierra, llamada Airavathi; y el Rey Elefante Airavath; pues quienes; también habían venido para presenciar la Suprema Gloria de Dios sobre la Tierra; y así fue como lo dijera el Glorioso Eterno Creador Universal; pues he aquí el divino Rostro de la Faz Radiante del Hijo de Dios en un Principio, fue cubierto por una Auspiciosa divina Máscara de un Elefantito; y es así que desde aquel día; el maravilloso Hijo de Dios, nunca más se llamó Ekadanta; 








fue la divina maravillosa Máscara de Elefante, quien guardó el verdadero Rostro Radiante del Uno Unigénito de Dios vuestro; y desde aquel momento fue representado incomparablemente; como el divino Elefante de Dios; que a pesar de su Nueva Apariencia inigualable, fue el más atrayente irresistiblemente de todos los tiempos; pues su divina Gloria ha permanecido a través de los tiempos y seguirá por siempre; pues siendo la Primera Encarnación de Dios más Suprema, es irresistible divina Atracción Espiritual; así fue divinos seres benditos; porque de Verdad os digo, que el maravilloso Unigénito de Dios, nunca más se llamó Ekadanta desde aquel Día Glorioso; entonces fue que la Madre Parvathi, preguntó al Bendito Vishnú: ¡Oh, Ser Auspicioso de la Segunda Dimensión Trascendental!, ¿Con qué Nombre le llamaré a Mi Amado Hijo, y con qué Nombre le conocerá el mundo?; entonces fue que la divina Lakshmi, la Hermosa Madre de la Segunda Dimensión Espiritual, lo bautizó expresando el Nombre desde el fondo de su corazón diciendo: Se llamará Ganesha, el Dador Auspicioso del Todo; por ser el Gran Poseedor de las Bendiciones y Glorias de Dios incomparables; así se llamará Ganesha, Fuente de Bendiciones Supremas y de Toda Gloria en la Vida; mientras tanto, la Bendita Saraswati, Madre de las Sesenta y Cuatro Artes desde su Gloriosa Morada, Reino de los Cielos Celestiales dijo: Se 








llamará Vinayaga, el Supremo Guardián de los Secretos de Dios; así también el Todo Victorioso, Dador de Protección, Fortaleza, Liberación, y Sabiduría de Dios; mas, la divina Rudrani, desde su Tercera Dimensión Espiritual dijo: Se llamará Rajendra Karttikeya, el Supremo Rey de Reyes, y Señor de Señores; el Comandante Rey de los Ejércitos Celestes, montado en una Nave Blanca surcando los Cielos; quien ha de descender al final del tiempo como el Poderoso Rudra; el Ekalki de Manos de Hierro, Destructor del mal y Reinvicador del Bien; quien a todo árbol que no da buen fruto, abatirá en polvo de la tierra; y mientras tanto; la divina Ishani, desde su Cuarta Dimensión Espiritual y Reino de los Cielos Trascendentales dijo: Se llamará Vidhikya, el Supremo Señor del Mandato; así mismo el Inquebrantable Cumplimiento del Mandato, Verdad, y Justicia; y lo más Trascendente del Amor estará en Él como en ningún otro, siendo la Fuente del Corazón Supremo, floreciendo como las flores más hermosas del Universo; así es como el Supremo Avatar de Dios, la Gloriosa Encarnación de Suprema Trascendencia; tomó diversos Nombres en el Oriente de vuestro planeta, en estas maravillosas Tierras Sagradas de la India; pues así mismo; en el Occidente del planeta Tierra, el Hijo de Dios se consagró como el Grandioso Jesucristo; en el Bendito Jesús de Nazareth; quien siendo la gloriosa Encarnación del Primogénito de Dios, hizo 








grandes Hazañas Auspiciosas; así mismo fue guiado por una Nave Celeste luminosa como una estrella; así es divinos seres benditos; las diversas Expansiones de vuestra Suprema Madre Divina, expresaron sus gloriosas Misericordias Divinas; entonces el Cielo refulgió en un esplendor y los Cielos se abrieron; porque Yo, vuestro Absoluto Dios Shiva ShamHari, ShamHari Jehová; expresé Mis Palabras diciendo: Yo Soy Shiva ShamHari, ShamHari Jehová vuestro Dios; he aquí, éste es Mi Hijo Amado, Mi Amadísimo Hijo Bendito quien ha de Encarnar infinitamente en todos los mundos y Universos; y también será el Bendito Primogénito del divino Brahma el Creador; el Primogénito del Bendito Vishnú; el Primogénito del Bendito Rudra; el Primogénito del Glorioso Shamisha; el Primogénito del Auspicioso Sadhakya; y el Primogénito del Radiante Shambhú; así ha de ser el Majestuoso Primogénito de Mis Seis Grandiosas Expansiones; porque Yo vuestro Dios, moro bajo la forma de cada una de ellos; y bajo todas las formas del infinito sin fin; así pues del Infinito, se oyó la Voz Refulgente de vuestro mismo Dios Uno Absoluto; pues en aquel día, vuestro Altísimo Uno Santo de las infinitas Alturas; expresé Mis Supremas Palabras Trascendentales; pues verdaderamente os digo, que en aquel día expresé verazmente: Mis amadísimos Seres benditos del Infinito; vosotros congregados en el Cielo y en la 





Tierra; pues en este gran Día Glorioso, en el Gran Día de Shiva ShamHari, ShamHari Jehová; oíd Mi Palabra Suprema: Mi Amadísimo Supremo Primogénito, por ser la Encarnación de lo Trascendente, se llamará Ganapatya, el Glorioso Hijo del Padre Supremo; porque será el Señor y Jefe de Todas las Potencias Universales y de este planeta Tierra; así mismo; porque es Ganesha, el Gran Guardián Protector de Todas las Criaturas, el Dador de Victorias y Triunfos; el Manso de Corazón, quien con Amor Puro conduce hacia Mí; y por esto y por mucho más de las infinitas Glorias y Poderes del Hijo Ganapatya; verazmente e inquebrantablemente os digo: He aquí que al final de los tiempos, Yo vuestro Dios único, retiraré la Bendita Máscara de Elefante que cubre el Rostro Radiante de Luz de Mi Amado Hijo Primogénito; pues en aquel tiempo sabrán realmente su Bendito Nombre Original, Ekadanta, Ekaulama, el Uno Glorioso de la divina Faz Radiante; así amados hijos de los confines del Universo y de la Tierra; Hoy bendigo a todos con el Gran Símbolo de los divinos Elefantes, distribuidos como buena fortuna auspiciosa; y para todo fin; así es divinos seres benditos; verdaderamente así aconteció en un divino Principio Lejano; luego de esto, en el espacio infinito se oyó el silencio absoluto, pues ni el aire se movía para nada; ni el tiempo cambiaba; porque verdaderamente todo se había paralizado en un divino Silencio infinito; y en aquel momento todo fue auspicioso; todos 
rejuvenecieron en la presencia de Dios y del Hijo de Dios; sucedió que todas las criaturas se magnetizaron con la Gloria Trascendental del Supremo Acontecimiento; luego, todo volvió a la normalidad; y todas las criaturas del Universo infinito, se dispusieron a abordar sus Naves; así las Naves pequeñas de color plateado y las de colores brillantes, luminosos, e incandescentes; se sumergían en las Naves más grandes y mucho más gigantes; así cada una de las Naves Cósmicas y Universales, se deslizaron velozmente en distintas direcciones del Cielo desapareciendo instantáneamente; porque cada una de las infinitas criaturas, retornaron a sus respectivos lugares; a sus propias moradas, Galaxias, y Regiones a que pertenecen; pues partieron llenos de Luz que emanaba del Bendito Unigénito de Dios; lo cierto es que realmente el Niño de la Faz Radiante, fue extremadamente atractivo; con una Belleza insuperable; y con un Resplandor Autosuficientemente espléndido; pues su Bello Rostro refulgía en Luz, Verdad, Amor, y Sabiduría Trascendental; realmente sólo bastaba estar cerca del Ungido Niño Unigénito de vuestro Dios Divino, para estar llenos de Gloria e Iluminación del Espíritu; así es mis amados seres benditos; porque de Verdad os digo que en aquel ambiente iluminado, muchos Espíritus presentes lograron plena Iluminación Espiritual; y cuando retornaron a sus moradas llenos de Realización Espiritual; lograron su Cuerpo Original y reingresaron a las Maravillosas Dimensiones 








Espirituales; mientras tanto; los seres de las bajas Regiones y moradas, retornaron llenos de Luz del Espíritu a sus respectivas moradas; y llegando allí, se convirtieron en sabios Espirituales; y ayudaron a liberarse a muchos Espíritus, quienes pagan sus culpas cometidas en los bajos mundos; es así que muchos Espíritus salieron a la Luz, a los planetas o mundos de la Luz como el vuestro; porque vuestro planeta aún es un planeta de Luz en comparación a los planetas más de oscuridad total; así es divinos seres benditos; y como dijera vuestro Dios en un Principio, el Hijo Primogénito de vuestro Dios; encarnó por siempre en todos los mundos; porque teniendo la misma Herencia y Potestad de Dios vuestro; el Bendito Primogénito de Dios, tiene el Glorioso Poder de estar una y muchas veces a la vez; y aunque sigue encarnando en infinitos mundos; y ahora se ha expresado como el Glorioso Ekaulama.-

SHIVA Y SHAKTI.-

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